viernes, 29 de mayo de 2009

Encuentro Nacional de CEBs

Herman@s: luego de un tiempo de silencio les compartimos la alegria de este sencillo material que nos llego via "Chiche Zubimendi" una hermosa mujer de la Comunidad Eclesial de Base de la Medalla Milagrosa. Ella pertenece a la capilla de La virgen de Guadalupe y Juan Diego y estuvo participando del encuetrno de las CEBs en Salta, ese intento de volver a vivir como las primeras comunidades, con los pies en la tierra y con el corazon en el discipulado de Jesús de Nazaret, nuestro SEÑOR. Chiche (es una señora) , aunque no lo crean...nos estuvo ayudando en silencio a hacer los segundos sorrentinos del año pasado.
Desde su sencillez , alli van entonces las conclusiones del encuentro.
Que sirva de inspiracion.


Encuentro Nacional de las Comunidades Eclesiales de Base-
Salta (Argentina)
Chiche Zubimendi - Mar del Plata - Argentina

CARTA A LAS COMUNIDADES

Los participantes al VII encuentro nacional de las Comunidades eclesiales de base -Salta 2009- queremos compartir con ustedes la experiencia de unidad que ha significado este encuentro, signo de la presencia de Dios.
No ha sido un parate sino una inyección de confianza, un desafío, expresión de una Iglesia caminante, participativa, como en una mesa grande donde todos caben y donde aprendemos a vivir la experiencia de Dios en cada hermano. En el diálogo con distintas regiones del país y hermanos de países vecinos hemos visto la situación generalizada de marginación, fruto de un sistema económico instalado.
Nos sentimos desde las comunidades eclesiales de base un signo de esperanza para toda la Iglesia y queremos seguir siendo un grito profético de anuncio y denuncia.
¿Donde queremos estar?
“ALLÍ DONDE EL PUEBLO SE JUEGA LA VIDA”

• Con los jóvenes y las familias en riesgo.
• Con los desempleados.
• Con las víctimas de toda adicción.
• En la lucha por la ecología y en la defensa de las tierras.
• Con los pueblos aborígenes.
• En los barrios marginales, asentamientos y villas.
• Con las comunidades rurales y migrantes.
• Con los chicos de la calle, muchas veces explotados y prostituidos.
• Con los ancianos desamparados.
• Con las personas con capacidades diferentes.
• Con los enfermos sin cobertura social.
• Con las madres solteras.
• Con las víctimas de toda violencia.
• Con los privados de libertad.
• Con los que han perdido la esperanza.

“ALLÍ DONDE MUCHOS SE JUEGAN LA VIDA POR EL PUEBLO”

• En los grupos de vecinos. En los centros barriales.
• Con los maestros que creen en los niños.
• Donde tantos se juntan para compartir el pan que les ha sido negado
* En los espacios de decisión política y social.
¿Cómo queremos estar? “SIENDO PRESENCIA LIBERADORA DE JESÚS”

• Formando y participando en redes comunitarias.
• Anunciando y denunciando las situaciones que lastiman la vida de tantos.
• Viviendo a fondo las celebraciones religiosas de nuestro pueblo, orando y contemplando la acción de Dios.
• Haciendo de la Palabra de Dios el alimento de la lucha diaria contra la opresión.
• Saliendo al encuentro de los grupos religiosos que quieren construir un mundo mejor.

ESTAMOS FELICES DE SER NUEVO ROSTRO DE LA IGLESIA EN LA BASE DEL PUEBLO, CON LA CERTEZA DE QUE TODO CAMBIO VIENE DESDE ABAJO.LAS COMUNIDADES ECLESIALES DE BASE -COMO JESÚS DE NAZARET- ESTAMOS VIVAS Y EN CAMINO.
Participaron en este encuentro: Hna. Marta Riccioli HMA y los SDB: Facundo Arriola, Carlos Barbero, Carlos Morena y Fernando Montes.

martes, 19 de mayo de 2009

¡Gracias Mario! Estarás entre nosotros...

Eduardo Galeano
"Sobre Benedetti, el dolor se dice callando"


Todas las palabras que ha dicho y escrito en su vida Eduardo Galeano no le alcanzaron hoy para expresar su dolor por la muerte de Mario Benedetti."¿Qué puedo decir?", dijo el autor de Las venas abiertas de América Latina, la voz entrecortada, cuando se le interrogó sobre la impresión que le había causado el deceso de aquel grande de la literatura uruguaya e hispanoamericana."Benedetti" significa "benditos" en italiano, y lo único que puedo decir es eso: Benditos los hombres y mujeres generosos como él, apenas acertó a decir Galeano.Parece una contradicción que no pueda usted, un maestro del lenguaje, encontrar las palabras para expresarlo (el dolor por la muerte de Benedetti) -insistieron los periodistas.No -respondió Galeano-, porque yo no solo soy enemigo de la inflación monetaria, sino también de la inflación "palabraria". Y me parece que el dolor se dice callando.

¿Por qué cantamos?
M. Benedetti y A. Favero

Si cada hora viene con su muerte
si el tiempo es una cueva de ladrones
los aires ya no son los buenos aires
la vida es nada más que un blanco móvil
usted preguntará por qué cantamos...

Si nuestros bravos quedan sin abrazo
la patria se nos muere de tristeza
y el corazón del hombre se hace añicos
antes aún que explote la vergüenza
usted preguntará por qué cantamos...

Si estamos lejos como un horizonte
si allá quedaron árboles y cielo
si cada noche es siempre alguna ausencia
y cada despertar un desencuentro
usted preguntará por que cantamos...

Cantamos por qué el río está sonando
y cuando suena el río / suena el río
cantamos porque el cruel no tiene nombre
y en cambio tiene nombre su destino
cantamos por el niño y porque todo
y porque algún futuro y porque el pueblo
cantamos porque los sobrevivientes
y nuestros muertos quieren que cantemos
cantamos porque el grito no es bastante
y no es bastante el llanto ni la bronca
cantamos porque creemos en la gente
y porque venceremos la derrota
cantamos porque el sol nos reconoce
y porque el campo huele a primavera
y porque en este tallo en aquel fruto
cada pregunta tiene su respuesta
cantamos porque llueve sobre el surco
y somos militantes de la vida
y porque no podemos ni queremos
dejar que la canción se haga ceniza.

miércoles, 6 de mayo de 2009

Yo estuve arriba del AVION

Dejamos a continuacion un texto escrito por Adolfo en el día de la fecha. Recuerda como vivió su experiencia de estar en un avion a punto de ser empujado al Río de la Plata. Y como se sostuvo en la fe y en la esperanza.

Memoria del 5 de mayo de 1977
Adolfo Pérez Esquivel

Cada persona guarda en su memoria hechos, acontecimientos que marcan su vida y que no son aislados en la vida del pueblo y la situación del país y en la comunidad de pertenencia de cada uno.
Al regresar del Ecuador después de participar en el encuentro de Obispos Latinoamericanos que se realizaba en la Casa de Santa Cruz, en Riobamba en la Diócesis del Obispos Leonidas Proaño y los hechos vividos, como el asesinato de Monseñor Angelelli en la Argentina, uno de los obispos invitados que no pudo llegar al encuentro. Estuvo el Arzobispo de Santa Fe, Monseñor Vicente Zaspe.
Mas en http://www.rebelion.org/noticia.php?id=84880

sábado, 2 de mayo de 2009

Va otra, esta de una mujer (veran que se nota)

Esta, es de una mujer anonima para nosotr@s. Vale lo que dice...
Ella es mujer y vibra de otro modo. Y siente de otro modo.
Nos lo va a hacer saber con esta carta abierta.

Carta Abierta al Presidente Fernando Lugo
Buenos Aires, jueves, 16 de abril de 2009

Por Claudia Florentin


Estimado Presidente: me he quedado pensando en su confesión. Toda confesión es bienvenida. Pastoralmente hablando, libera, usted lo sabe. Nos alegramos con toda confesión y me alegra escuchar que ahora se hará cargo de lo que confesar conlleva.
Imagino que su corazón y su espíritu estarán más livianos…pequeña carga llevaba. Que Dios le ayude a vivir como padre, de verdad, y no solo para que lo reproduzcan los medios. Lo deseo por Guillermo, sobre todo.
Pero soy mujer, sabe, y no puedo dejar de pensar en Viviana.
A ella sí que su confesión le resultará tardía. Porque usted pudo ocultar durante dos años su paternidad, su “pecado”, pero ella no. ¿Cómo oculta una mujer el fruto de su “pecado”? a ella le toca, siempre, cargar con la responsabilidad de dos. Y para más peso, asumir la responsabilidad que el hombre no asume, aunque sea obispo.
Y si, me dice un amigo, no debe haber sido fácil para él: obispo, candidato a la presidencia…. ¡Más vale tarde que nunca!, dicen otros.
Yo no coincido. Discúlpeme usted, pero no puedo pensar que se calló por falta de coraje nada más. Creo que los que callan su responsabilidad lo hacen con conciencia, y en estos casos más, sabiendo que exponen a la mujer a la marginación, a la vergüenza (en pueblo chico, todo se sabe), a la soledad de una maternidad casi inconfesable.
Creo que usted se dejó impregnar por el machismo, ese mal que se pasea impunemente por este mundo.
El machismo se nutre de poder, un poder basado en esquemas desiguales. Y en su historia, esos esquemas están bien presentes.
Es más, hasta diría que, en otros casos, estaríamos sospechando un acto en las márgenes de la ley. Viviana confiesa una relación que comenzó cuando ella tenía 16 años. Y usted, 47, si no me equivoco. ¿Relación mutuamente consentida? Imposible, aunque la chiquilla haya dicho que sí. Porque a los 16 años una mujer es apenas una niña, pero básicamente porque la diferencia de lugar, de jerarquía, puso a esta niña en situación de clara desigualdad.
El sacerdote, el obispo, el pastor de las ovejas, el hombre, sí, establece su poder de dominación, de seducción, de poder, frente a la mujer apenas en ciernes; frente a la “ovejita” que debe ser cuidada.
La estructura de poder está bien definida. La niña- ya con una primer carencia afectiva viviendo de prestado en casa de una pariente o una empleadora-, enfrentada al macho fuerte, inteligente, protector, al hombre adulto, maduro, poderoso, ¿Por qué quien niega que un obispo tiene su cuota de poder y sabe usarla?
Me dicen, ¿por qué ella habla ahora? ¿Qué quiere? ¿Qué le dieron? No sé, no la conozco, ¡pero conozco tantas miles de realidades iguales! Mujeres, niñas, adolescentes, que un buen día se hartan de tanto dejarlas bajo el felpudo! “Le querrá hacer daño ahora que es presidente”, oigo por ahí. La verdad, si así fuera, creo que lo mejor hubiera sido declararlo hace dos años ¿se imagina?
Ahora se arregla rápido, el apellido y ya. ¡El apellido! Todo un tema, como que eso fuera a pagar las noches de insomnio, los dolores de parto, las angustias a fin de mes, los momentos de fiebre y nanas frente a la cama del niño amado. Nada lo retribuye, y las mujeres, ¿sabe? también sabemos de hartazgos, cansancios y aburrimientos. El mito de la madre abnegada que todo es capaz de soportarlo por amor, es también un mito sostenido por el sistema de poder patriarcal. No somos madres, somos mujeres, ante todo, con vida, derechos, sueños, proyectos y afectos; los hijos, son parte de esos enormes afectos.
Le confieso que cuando asumió me encantó el gesto de donar su sueldo al Instituto Paraguayo del Indígena. Ahora que me entero que sabía de la existencia de un niño que era su responsabilidad, me parece un acto demagógico, más allá de lo pertinente de su gesto. Millones de padres se pasan la vida siendo generosos con el mundo, pero sin destinar nada a la atención de sus hijos/as o dejando su cuota como que fuera una dádiva que la madre de los niños, sabrá Dios cómo gastará.
Usted dijo hoy que los niños y niñas de su país deben tener sus derechos garantizados; esos derechos empiezan con la madre que los llevará en su vientre, a veces con ganas, a veces a la fuerza, fruto de abusos y violaciones, y miles de veces, desamparada.
Le pido a Dios, estimado Presidente, estimado hermano, que usted pueda ver esta historia, su historia, no como un acto cerrado por haber hecho lo “legalmente correcto”, sino como una realidad que, comenzando por su casa, afecta a miles de mujeres paraguayas, sus conciudadanas, y sepa actuar diferente, como hombre, como cristiano, y como jefe de estado.